UNIMINUTO Transforma Urabá con investigación sobre fibra de Abacá
Se busca innovar económica y ambientalmente a través de un cultivo inexplorado en Colombia con potencial internacional.
Desde la Rectoría Antioquia Chocó en el Urabá Antioqueño, se busca demostrar como parte de la estrategia de Agendas Regionales, las propiedades de la fibra de abacá, un insumo agroindustrial poco conocido en Colombia.
Este cultivo, común en Filipinas y Ecuador, se emplea en telas, papel moneda, textiles hospitalarios, construcción, automoción, alimentos y cables eléctricos. Aunque en Colombia es poco conocido, el docente de UNIMINUTO, Octavio Fernando Marín, propone a largo plazo convertir al país en un productor de este material, aprovechando las condiciones climáticas en el Urabá antioqueño.
La Abacá prospera en climas húmedos tropicales, compartiendo características edáficas y climáticas con otros productos como el banano y el plátano. “Esta similitud abre un amplio horizonte de oportunidades para la industria colombiana, ya que la versatilidad de la fibra de abacá se traduce en más de 200 aplicaciones en diversas industrias, lo que representa un significativo potencial de uso”, afirmó el investigador Octavio Marín.
Dado que este proceso es experimental en Colombia, se requiere inicialmente la realización de pruebas de calidad y un estudio para determinar los posibles costos de producción de la fibra. Esto permitirá, que el Abacá se convierta en un material atractivo en el mercado internacional. A pesar de que podría encontrar aplicaciones en Colombia, actualmente no existe un mercado específico para esta fibra.
Una mirada empresarial
John Jairo Mira, director agrícola de la Compañía de Empaques S.A., una organización colaboradora del proyecto destaca el potencial exportador del Abacá. Mira enfatiza que: “aunque el mercado no sea ilimitado, podría ser considerablemente amplio. Para ponerlo en contexto, Colombia produce alrededor de 20 toneladas de fique al año. Si comparamos esto con la producción global de fibras duras, Colombia no alcanza ni siquiera el 1% de la cuota. Esto demuestra que cualquier cantidad producida, siempre y cuando sea competitiva en precio y calidad, tiene un mercado potencialmente significativo para crecer”, agrega.
Aunque en países como Ecuador y Costa Rica se ha demostrado la alta calidad de la fibra de Abacá, con una resistencia superior al fique producido en Colombia, el primer paso es asegurar que su producción en el país cumpla con la norma NTC 992, la cual regula la producción de fibras duras en el territorio.
Este proyecto no solo añade una nueva industria al mercado colombiano y contribuye a mejorar las condiciones de vida en las regiones, sino que también busca un impacto ambiental positivo al reemplazar el uso de plásticos en algunas industrias con estas fibras.